Blanche de Bressac
La gran Pipon
Elin de Saint Clarc
Eric de Villemont
Cuatro personajes, cuatro actores.
Ayer representamos por primera vez <<No es verdad>> de Francisco Nieva. Y fue uno de esos momentos en los que sentí plenitud. Mientras actuaba, con otras tres pedazo de actrices (Andrea, M. y Henar), me sentí genial conmigo mismo y con mi personaje... Una sensación que, creedme, hacía mucho que no experimentaba (hablo de la plenitud teatral, he sentido otras plenitudes... Johann, desvarías mucho). A parte de pasármelo como un enano, creo que aprendí bastante. He aprendido ya mucho durante los ensayos, pero me parece que la guinda siempre está en el momento de la actuación...
Me he imaginado la sala donde transcurre la escena millones de veces, siempre igual; pero ayer parecía que la estaba viendo de verdad... Los candelabros, la oscuridad, el humo... Ayer hubo auténtica Magia encima del escenario, Magia que nos hizo olvidarnos de nuestra personalidad y nuestro yo en sí, y convertirnos en miembros de la nobleza francesa provinciana... Magia que hizo temblar de miedo al público...
Como siempre, después de un momento en el que siento tal desbocada felicidad, siento mucho no poder volver a revivirlo... Pero siempre pienso también que me quedará siempre el recuerdo de haberme sentido tan bien y tan pleno. Cada vez que quiera recordar a cualquiera de esas tres geniales compañeras, seguramente recurra a este momento, esa hora de teatro que compartimos los cuatro... Esas risas infinitas: cuando nos equivocamos, cuando miramos mal a un personaje (porque lo pone en el libreto eh...), cuando hay momentos... bueno..., siempre. Qué gratificante es que al público le haya gustado tanto, también... Jo, quiero decir tantas y tantas cosas que, como siempre, esta entrada de blog se me hace muy pequeña... Quiero expresar todo lo que sentí, pero bueno; supongo que eso se queda dentro de mí, para siempre... En ese rinconcito mágico de mi corazón.
Por eso el teatro es mágico, porque puedes dejar de ser tu por media hora, y sentirte en la piel de otro..
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